Resistió
una operación a corazón abierto gracias al positivismo y gran amor hacia su
esposa, hijos y nietos. Miguel Portanova
Claros, es sin duda un periodista olímpico, alguien que tiene a los 73 años,
todavía bien encendida la llama de la vida.
“La
mente opera todo, a los tres días de aquella operación, previa autorización
médica, comencé a caminar y después con los años, pude imitar hasta los mejores
piques de Usain Bolt” nos comenta este gran periodista deportivo, quien ha
cubierto 11 Juegos Olímpicos, 8 Mundiales de Fútbol e innumerables eventos
afines.
Los
minutos de esta entrevista transcurrían velozmente, pero don Miguel siempre nos
sonreía y atrapaba con su actitud elocuente. Además, se dio tiempo para darnos
consejos, que debemos llevarlos siempre presentes.
“Para
triunfar en la vida debemos tener vocación por la profesión que elegimos,
respeto, dedicación y disciplina Se
viven tiempos muy difíciles pero estas cosas ustedes los jóvenes no pueden perderlas. Hay cosas que están
animalizando a los peruanos y si distorsionar el lenguaje u otras situaciones
como ser idiotizados por el celular son parte del recambio generacional,
estamos mal”.
Portanova,
sólo usa el Facebook para escribir artículos periodísticos y no se deja dominar
por las ansías humanas de ser tendencia en las redes, muchas veces a costa de
nuestra vida personal.
Cuando
le preguntamos sobre su familia, Miguel, nos regaló a través de sus ojos un
brillo especial, pues siente un orgullo enorme por tener tres hijos
profesionales, que heredaron su modestia y entrega total. Además, agradece a su
esposa por el amor incondicional que durante 53 años de matrimonio, le ha
entregado de manera incondicional.
“La familia es
primero que nada. Michael es médico, Luigi habla cuatro idiomas incluido el
nuestro, es un gran administrador de empresas y Piero, también asesora empresas,
es además psicólogo y tiene varias profesiones, mis hijos son mejores que yo”,
remarca.
Don
Miguel, tiene como segunda prioridad al trabajo y en tercer lugar están los
amigos, que cada vez dice son más difíciles de conseguir debido a la falta de
tiempo.
“Tuve
mucha suerte al trabajar con los periodistas top de mi época, tal es el caso de
Emilio Lafferranderie, Humberto Martínez Morosini, Oswaldo Cuadros Lazo, Óscar
Artacho, Pocho Rospigliosi, entre otros con los que sin duda aprendí”.
“La
Voz del Deporte”, siempre es serena y optimista, pero cuestiona duramente a
aquellos periodistas que utilizan lenguaje incorrecto o copian extranjerismos e
intentan ponerlos de moda en nuestro país al momento de narrar. Él tiene la
autoridad suficiente para cuestionar a cualquiera, pues fue reconocido por la
Asociación Internacional de Periodistas, durante los Juegos Olímpicos de
Londres 2012, debido a su impecable trayectoria.
Aunque
suene contradictorio, él dice leer muy
poco, pero es autodidacta y siempre aconseja tener un diccionario bajo el
brazo, pues debemos ser hombres bien hablados. La virtud de comunicarse con propiedad,
le permite hasta ahora marcar diferencia y obtener mucho reconocimiento de la
gente.
Finalmente,
estamos en la obligación de resaltar que Miguel Portanova Claros es un hombre
valiente, pero como todo ser humano, le tiene un gran temor a la muerte.
“Le
tengo miedo a la muerte, si es que no me deja despedirme de la gente que
quiero, tengo hijos a los que deseo ver todavía, un nieto enfermo al que anhelo
ver curarse y le entrego mi vida al señor en este mismo momento si eso pasa. Sin embargo, estoy haciéndome un plan que espero pueda mantenerme vivo un buen
rato todavía.
Así es don Miguel, un hombre motivado por la “llama olímpica de la vida”, con espíritu aventurero y locura innata, una “Voz del Deporte” que quedará entre nosotros siempre grabada